18 abr 2016

"La Crítica"

EL DESEADO CUERPO "10"

La mayoría de las personas sufren una gran presión social para conseguir un cuerpo bello, delgado y joven, el tan deseado cuerpo "10".

Un problema social

Vivimos en una sociedad en la que se ha impuesto la delgadez (incluso extrema) como canon de belleza. Este "modelo de belleza" se nos ha metido gracias a los medios de comunicación y la industria, es capitalismo puro y duro; a través de la publicidad se intenta persuadir a la sociedad, provocar una reacción en las personas, para que consuman sus bienes o servicios, y así responder y/o estar a la altura de ese ideal. 

Como dijo Germaine Greer: “Como la celulitis no mata y tampoco desaparece es una mina de oro para los médicos, nutricionistas, naturópatas, aromaterapeutas, expertos en fitness y organizadores de planes de vida. Los fabricantes de cremas, aparatos de ejercicio, cepillos para la piel y suplementos dietéticos ganan todos un pastón gracias al disgusto, atentamente cultivado, que sienten las mujeres por sus propios cuerpos”

Haciendo referencia a una publicación anterior "La 38 me aprieta el (...)" repito que el modelo de de belleza es algo que ha ido cambiando a lo largo de la historia, es cíclico, al igual que las modas, la economía, las políticas, etc. Las diferentes civilizaciones que han surgido a lo largo de la historia de la humanidad, tenían sus propios ideales de belleza, incluso en la actualidad, la belleza se percibe de distintas maneras en distintas civilizaciones y partes del mundo, pero claro, estas no sufren el continuo abuso de medios.

Al hablar de Civilizaciones, sociedades, medios de comunicación, industria, etc, comienzo a pensar en términos sociológicos, viniéndome a la cabeza el término Sociedad de Masas. Según J. Ortega y Gasset, "(...) es considerada la cultura popular moderna, asimilada pasivamente por el pueblo, convertido en objetivo comercial (...)". Es decir, como sociedad moderna, asimilamos todo lo que se nos impone. Los medios de comunicación son los principales transmisores de cultura, emiten concepciones de la sociedad que pueden ser percibidas e interpretadas de forma distorsionada, y que son aceptadas como referentes sociales, afectando sectores básicos de la vida cotidiana.  

Es en este último punto dónde aparece el problema social. Al percibir por medio de la publicidad diferentes iconos, modelos e hitos de belleza, los asumimos, aceptamos, interiorizamos y hacemos que formen parte de nuestra vida. El problema se encuentra en los límites reales de la belleza.

Uno de los verdaderos puntos negativos de la vida en sociedad es la creación de estereotipos y prejuicios sociales por motivos de diferencia física, en el caso que explico. Esto es, el rechazo a lo diferente. al habérsenos impuesto una serie de conceptos de belleza, rechazamos todos aquellos modelos que se alejen. 
El miedo y el rechazo a lo diferente, hace que suframos una preocupación excesiva por la imagen. El problema de este extraño y excesivo culto al cuerpo es que estamos creando sociedades y generaciones que se preocupan más de su físico que de adquirir conocimientos, de prosperar como personas, despreocupadas por problemas del mundo real y si por un mundo artificial, que ya en si supone un grave problema social, al que además se asocian otros a nivel personal, emocional y físico. 

La verdad

Volviendo a hacer referencia a la publicación  "La 38 me aprieta el (...)"
"El mundo está lleno de gente normal, con más o menos barriga, más o menos pecho, más altas, más bajas, mas rubias, morenas, pelirrojas, bicolores... con ojos de todos los colores (algunos hasta de varios), más o menos caderas, pelos, brazos, orejas, nariz... pero todos, antropomórficos."
Por mucho que nos queramos empeñar en ser "perfectos" adaptándonos a lo que nos quieren imponer, ya somos cuerpos perfectos desde el momento en que nacemos y nuestro mecanismo empieza a funcionar, un mecanismo bastante complejo.

La verdad es esa, que estamos hartas y hartos de ver en cine, televisión, etc, a personas con cuerpos esculturales, con caras geométricamente perfectas, con ropas a la última moda y carísimas, cuando lo que vemos al salir a por el pan, al coger el autobús, al estar en la sala de espera de cualquier sitio, son personas normales y reales, con mayores preocupaciones (o eso me gustaría pensar) que ir al gimnasio, no comer hidratos de carbono por la noche, inyectarse toxinas para esas marcas de expresión incipientes...

Por suerte, se está produciendo un incremento de los debates, campañas  y movimientos sociales en contra de el excesivo culto a la belleza, aceptando los cuerpos reales y la auténtica belleza, además de nuevas normativas, campañas y políticas, por parte de las instituciones, que se implican sobretodo en los procesos educativos.

Nunca te comerías una naranja con piel ¿no?

La verdadera belleza, aunque todo esto suene a topicazo, no se encuentra en la cara o el cuerpo, no se encuentra en la forma de vestir, no se encuentra en el coche, la casa, o la pareja que tengas, la verdadera belleza se encuentra dentro de cada persona, bueno, dentro de algunas porque hay otras muy feas por dentro. la verdadera belleza se encuentra dentro de una mente, no necesariamente con estudios, dentro de una mente capaz de pensar por sí misma y de llevar a cabo los cambios y revoluciones que necesite en su individualidad. La verdadera belleza se encuentra en un gran corazón, capaz de amar a cualquiera, capaz de entregarse, capaz de combatir injusticias, capaz de ser persona y no ser humano.

Por mi parte, considero que es bastante necesario abandonar el ideal de belleza social y aceptarse sin condiciones para gustarse, aceptar lo que eres y no sólo mirar por fuera, al fin y al cabo, nunca te comerías una naranja con piel ¿no?. 

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